1 abr 2010

Lo mío




Quiero volver a vivir, recorrer el huerto,
cosechar los frutos, acaparar sentimientos,
alimentarme de besos y compartir emociones;
y en la copa burbujeante de los brindis
reflejarme; y en los ojos de mis hijos…
y en la mirada de todos, encontrarme.

Quiero agradecer a Dios por la unión de la familia,
por la salud y el trabajo; por colmar la mesa diaria
de panes y bendiciones; por encontrar semejanzas
en los hoyuelos y gestos, en las muecas y miradas
de los niños; y en la pícara sonrisa contagiosa,
provocada por la carga intencional de las palabras.

Quiero retomar atajos, recordar por siempre el
poema 20, el del corto amor y el del largo olvido;
desandar caminos y llegar al cruce de las travesuras;
y acunar los nietos; y jugar con ellos al abracadabra,
al armar palabras; al juego de las escondidas…
y al juego de los encuentros.

Quiero guardar la caricia de las flores que caían de
aquel viejo paraíso, en el balcón de la casa; de esa
casa y esa calle, que poblaban por entonces los
naranjos, con azahares embriagando las mañanas
de dulzores, antes que noviembre llegue y antes
que los hijos partan.

Quiero quedarme y que sepas que aquí estaré;
por si quieres encontrarme, muy cerquita
del susurro de tu voz, al pronunciarme.
Quiero estar siempre presente, como esplendor
luminoso, en tus triunfos, en tu historia.

Y estaré también allá, en alguna madrugada, justo
a la hora en que el sol pretende alumbrar el día,
resistiéndome a partir como el lucero del alba.

Elva Ester Varotta

3 comentarios:

  1. Me encantó !!!!! Lo amé en cuanto lo leí!!!!
    Muy bueno!!!!

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  2. Una vida escrita en el lenguaje del alma... Una belleza condensada de emoción... FELICITACIONES POR EL TALENTO!

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  3. Sentimientos, sensaciones, afectos, pasajes cotidianos, emociones... todo ésto refleja este poema que rescata la pasión de vivir por algo tan trascendente como la vida misma.

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